En nuestra ciudad, 28 son ya las panaderías que adhieren a la elaboración de pan reducido en sodio, para contribuir la prevención de la hipertensión.
A nivel mundial, cada 17 de mayo se celebra el Día de la Hipertensión, establecido como una jornada en la que se realizan distintas acciones tendientes a generar conciencia acerca de esta afección. Por esto, durante todo el mes de mayo, en todos los Centros de Atención Primaria de la Salud (CAPS) como así también en la Asistencia Pública, habrá actividades sobre cuidados preventivos, dirigidos especialmente a la población adulta.
Una de las iniciativas impulsadas por el municipio es la adhesión de las panaderías al programa “Menos sal, más vida”, por la que ya 28 comercios de este rubro están produciendo y ofreciendo a sus clientes pan reducido en sodio.
Cabe destacar que Villa María está adherida al programa PROTEGER, por el que se trabaja en tres ejes, de acuerdo a lo propuesto por los Ministerios de Salud de la Provincia y Nación: la reducción del consumo de sodio, los espacios libres de humo y la promoción de la actividad física.
El menor consumo de sal disminuye el riesgo de padecer hipertensión, como así también infartos, anginas de pecho, accidentes cardiovasculares, enfermedades renales y cáncer de estómago. Se estima que, en nuestro país, el consumo diario por persona es de 11 gramos cuando lo recomendado a nivel mundial es de un máximo de 5 gramos de sal.
Además, en la información preventiva elaborada por el equipo de Salud, se explica que el sodio se encuentra en la sal de mesa que se consume a diario pero también en la mayoría de los alimentos que se compran ya preparados, conocidos como procesados o ultraprocesados; incluidos los dulces, dado que en la industria alimenticia es utilizado como conservante.
Una buena acción es corroborar en la etiqueta de información nutricional del alimento que se está comprando, la utilización de sodio. Lo recomendable es elegir alimentos que contengan menos de 120 gramos por cada 100 gramos de porción.
Otros consejos son:
-Utilizar alimentos naturales en lugar de conservas o enlatados. Las carnes, verduras, legumbres y frutas ya aportan la cantidad de sal necesaria a las comidas.
-Limitar el consumo de papas fritas, chizitos, palitos salados y otros snacks.
-Al cocinar, reemplazar la sal por hierbas aromáticas (albahaca, romero, tomillo, curry, salvia, menta), especias (pimienta, canela, cúrcuma) y otros condimentos como vinagre o jugo de limón.
-Enjuagar los alimentos enlatados o en conservas, como el atún, arvejas, choclo o aceitunas para retirar parte de la sal.
-Disminuir el consumo de salsas y aderezos preparados.
Mesas sin saleros
En tanto, desde la Secretaría de Salud de la Municipalidad de Villa María, también se avanza en la concientización y visita a espacios gastronómicos para coordinar acciones, tales como quita del salero de la mesa, disponibilidad de tres menúes en la carta que estén libres de sodio y la incorporación de la leyenda “La sal es perjudicial para la salud” en las mesas.