Considerado uno de los mayores problemas de salud pública a nivel
mundial, desde mediados del siglo XX la tasa de suicidios ha tenido un
constante incremento, especialmente en los países en vías de desarrollo.
Constituye una de las tres principales causas de muerte en la población de 15 a
34 años; si bien afecta a todas las edades, la mayor parte de los casos ocurre
en personas de más de 60 años. Este día fue establecido por la OMS,
Organización Mundial de la Salud, con el fin de alertar sobre un problema por
el que mueren en el mundo cerca de 3.000 personas cada día, que deja a muchas
otras con graves secuelas y que afecta también al grupo social del suicida. La
OMS, junto con la Asociación Internacional para la Prevención del Suicidio,
lidera el compromiso de los gobiernos de los distintos países en la toma de
medidas de prevención -como la creación de centros de salud mental
especializados- y propone la formación de redes y alianzas para impulsar nuevas
respuestas.
En 2010, la Asociación Mundial para la Salud Sexual invitó sus organizaciones afiliadas a establecer un día para promover una mayor conciencia social en torno a la salud sexual. Cada año, la celebración tiene un lema distinto. La Organización Mundial de la Salud (OMS) define a la salud sexual como un estado de bienestar físico, emocional, mental y social relacionado con la sexualidad; la cual no es solamente la ausencia de enfermedad, disfunción o incapacidad. Para que la salud sexual se logre y se mantenga, agrega la OMS, los derechos sexuales de todas las personas deben ser respetados, protegidos y ejercidos a plenitud. La sexualidad es un aspecto central del ser humano a través de su vida e incluye sexo, identidades y roles de género, orientación o preferencia sexual, erotismo, placer, intimidad y reproducción. ¿Qué es la sexualidad? La sexualidad es una parte integral de la personalidad de todo ser humano. Su desarrollo pleno depende de la satisfacción de necesidad